En la laguna de Sobrado custodiamos en propiedad un par de parcelas. En una de ellas está el observatorio ornitológico. Cada cierto tiempo nos acercamos por allí para limpiarlo y de paso recoger la basura que aparece en las parcelas, en las orillas de la laguna y en el tramo de camino jacobeo que pasa a su lado.
El pasado domingo nos encontramos con que el viento tirara varios sauces. Aunque no rompieron nada, quedaron apoyados contra el tejado del observatorio, cegando la visión a través de las ventanas. Por este motivo un par de voluntarios volvieron hoy a Sobrado para retirarlos y así recuperar su funcionalidad: Los aficionados a las aves lo agradecerán, especialmente cuando llueve.