Nueva invasora en la Alameda

13 noviembre 2018

 
Anteayer hicimos una visita de inspección a la playa de la Alameda (Miño), dentro de nuestro programa de apadrinamiento de espacios naturales. El principal objetivo era revisar la reaparición de especies exóticas invasoras, especialmente de los plumachos (Cortaderia selloana). Según se acerca el invierno, cada vez es más fácil localizar aquellos ejemplares pequeños que aún nunca florecieron, pues destacan entre la vegetación. Solamente encontramos seis pies, que arrancamos inmediatamente sin dificultad.

También retiramos toda la basura que encontramos. La pesamos antes de arrojarla en el contenedor: 104 kilos. Apareció principalmente en la arribazón traída por la marea, pues la zona dunar sigue manteniéndose bastante limpia. ¡Se nota el trabajo continuado!

Pero la sorpresa fue encontrar una nueva invasora entre la densa vegetación de la trasduna: el cáñamo de agua americano (Bidens frondosa). A esta especie le gustan los lugares húmedos y ricos en nutrientes. Su nombre en varios idiomas (carrapatón, devil’s beggarticks) alude a la capacidad de sus semillas para engancharse con facilidad en el pelo de los mamíferos o en las plumas de las aves gracias a un par de pelos dentados; también en la ropa, lo que resulta un incordio. Otro modo que tienen de dispersarse es flotando en el agua. Para que esta planta anual no logre reproducirse hay que arrancarla antes de que eche semillas.

Aunque este año llegamos algo tarde, hoy arrancamos todos los ejemplares localizados para evitar que se esparcieran las semillas que todavía no habían caído. También arrancamos nueve chopos híbridos (Populus x canadensis). Pasaron desapercibidos entre los sauces y alisos de la trasduna, pero ahora los delató el intenso color amarillo de sus hojas.


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