Para el sábado 20 de agosto hemos programado una jornada de voluntariado ambiental en la reserva de anfibios del Catorce.
El mes pasado firmamos un acuerdo de custodia del territorio para la creación de esta reserva, en el que el Ayuntamiento de Coirós nos cedió el uso y la gestión por 50 años de una superficie de 5 hectáreas. En esta jornada iniciaremos la primera fase de las mejoras previstas.
Vamos a aprovechar que la zona húmeda está totalmente seca para trabajar en ella sin riesgo de afectar a los anfibios. En esta jornada recogeremos toda la basura que encontremos, erradicaremos varias especies de plantas invasoras, amontonaremos el ramaje de la última corta y secaremos eucaliptos.
El punto de encuentro será el Centro de Salud de Betanzos, donde quedaremos a las 9:30 horas para compartir vehículos, contando con estar de vuelta a las 14:00. Como posiblemente no lleguen las herramientas para todos, lleva si puedes un hacha o una hoz. También es conveniente llevar unos guantes y vestir ropa y calzado adecuados para trabajar en el monte, así como algo de picar y de beber para cuando hagamos la pausa de media mañana.
Si quieres apuntarte a esta jornada y así participar desde el inicio en las tareas de creación de la reserva, ponte en contacto con nosotros con antelación (en la sección Contacto encontrarás la información necesaria). Recuerda proporcionar tus datos (nombre completo, DNI, fecha de nacimiento y móvil), indicando si debemos esperarte en el punto de encuentro o si irás directamente. De este modo podremos hacerte un seguro de accidentes y avisarte de cambios de última hora, además de que nos facilitas la organización.
¡Crear una reserva de anfibios bien puede considerarse vacaciones activas!
Post data: La reserva de anfibios creó el suficiente interés para que 24 personas dejaran de lado las playas y las fiestas patronales el sábado 20 de agosto para participar en la primera jornada de voluntariado que organizamos en ella. Retiraron toda la basura que localizaron, sumando un volumen de 5 m3, incluyendo dos bidones, uno de ellos lleno de alquitrán que estaba contaminando la tierra por una fuga. Se eliminaron especies invasoras (la budleya, varios plumeros y algo de zamarraga), así como varios eucaliptos en las zonas explotadas por la antigua cantera. También se amontonó buena parte del ramaje abandonado en la zona inundable.
