Hoy completamos la segunda fase de la eliminación del arbolado alóctono invasor en la playa de la Alameda.
Habíamos planificado para anteayer una jornada de voluntariado corporativo, con el fin de retirar parte de la biomasa de los árboles eliminados, pero determinados imprevistos obligaron a cancelarla. Consecuentemente, las quince personas que participaron en la jornada complementaria que programamos para ayer, a pesar de que trabajaron intensamente, no dieron acabado de retirarla. Por ese motivo, esta mañana se acercaron cuatro voluntarios y terminaron la tarea, logrando llenar hasta los topes el contenedor contratado. Las cifras hablan por sí mismas: 30 metros cúbicos de biomasa correspondiente a más de 675 árboles.
Sumando estos resultados a los obtenidos en la jornada de mayo, resulta en más de un millar de árboles eliminados en la trasduna de la playa de la Alameda. Su biomasa ocupó un total de 42 metros cúbicos y pesó más de tres toneladas, a pesar de estar totalmente seca.
Pero no podemos dar por erradicado este arbolado invasor. Ahora empieza la tercera fase: el control de los rebrotes. Pero ésta ya es una labor que requiere más paciencia que fuerza.
La conservación de la naturaleza precisa de financiación. Por ese motivo expresamos nuestro agradecimiento a CaixaBank, que en esta ocasión se ha hecho cargo de los gastos del contenedor, y al Grupo Naturalista Hábitat, por el usado el mes pasado. Y también, como siempre, a los participantes en estas jornadas de voluntariado. Su trabajo ha quedado recogido en un ameno vídeo.